miedo al miedo

El miedo hace huir o paraliza.Nos hace invisibles, manipulables, nos anula. Si somos capaces de no sentir miedo seremos ENORMES. No podran con nosotr@s y ell@s lo saben. La cuenta atras para un mundo màs justo y humano ha comenzado.

20 julio 2007


CARLO GIULIANI VIVE !

Hace seis años Carlo Giuliani, activista antiglobalización, murió asesinado por un policia en Genova, durante unas de las manifestaciones en protesta por la Cumbre del G8.

Pero Carlo Giuliani hoy está más vivo que nunca, porque sigue vive en el recuerdo de millones de ciudadan@ s y nunca lo vamos a olvidar.

Tengo que reconocer que cuando conocí a l@ s primer@ s amig@ s "antiglobalización" me engancharos. Nunca antes había conocido personas tan buenas, tan sinceras, tan honradas, tan lúcidas, tan despiertas; y precisamente fué unos meses antes de la cumbre de Genova.

La represión desmedida, la fuerza bruta, los golpes de la policia sin ton , ni son produjeron violentos enfrentamientos entre manifestantes absolutamente pacíficos y una policia que se comportó de modo brutal.

En los enfrentamientos también hubo algunos pequeños grupos que se comportaron muy violentamente , pero la mayoría de l@ s cient@ s de miles de manifestantes eran absolutamente pacífic@ s.

Han pasado seis años y hoy somos much@ s más l@ s ciudadan@ s que desde todos los lugares del planeta hemos comprendido que el modelo de desarrollo actual es insostenible y que por encima del dinero está "EL HOMBRE".

Necesitamos presionar a los políticos que elegimos para que haya un reparto justo de la riqueza que permita erradicar cuanto antes la pobreza extrema en la que viven millones de hombres, mujeres y niñ@ s.

Debemos presionar a los hombres y mujeres más poderos@ s del planeta para en vez de gastar nuestros impuestos en comprar armas, lo inviertan en educación, en sanidad, en alimentos, en medicinas.

Debemos presionarles porque todavía estamos a tiempo si cambiamos nuestras costumbres de detener el cambio climático.

Han pasado seis años y Carlo sigue haciendo posible que sigamos adelante.

GRACIAS CARLO !




Abogados juicio G-8 presentan grabaciones de la policía:

'Ojalá que mueran todos'

Los abogados de la acusación particular en el juicio que se sigue en Italia por los incidentes registrados durante la reunión del G8 en Génova en 2001 presentaron hoy unas grabaciones telefónicas en las que funcionarios y agentes policiales pronuncian frases contra los manifestantes como 'ojalá que mueran todos'.





El G8 de Génova seis años después


En el verano de 2001 se celebró en Génova la reunión del G8 (los países más industrializados del mundo más Rusia). Durante las multitudinarias protestas un manifestante, Carlo Giuliani, fue asesinado por las fuerzas del orden y centenares de otros manifestantes fueron agredidos, golpeados y detenidos. Según Amnistía Internacional en aquellos días “se verificó la más grande suspensión de los derechos democráticos en un país occidental desde el fin de la segunda guerra mundial”.
En 2005 se inició en Génova el juicio contra 28 policías que en la noche del 21 de julio de 2001 irrumpieron en la escuela Armando Diaz, donde estaban durmiendo un centenar de manifestantes, y llevaron a cabo una “carnicería a la mexicana”, según declaró en el proceso Michelangelo Fournier, un alto dirigente encargado de la seguridad durante el G8.
Los acusados tienen que defenderse de acusaciones muy graves: violencias hacia los manifestantes, falsedad, calumnias, fabricación de pruebas falsas (dos artefactos explosivos “molotov” puestos ahí por los mismos policías para justificar la feroz actuación).
A través de las declaraciones de los manifestantes y por las imágenes que se difundieron se pudo ver que los actos de protesta, incluso de los famosos black blocs, no eran nada comparados con la brutalidad de las numerosas fuerzas del orden desplegadas por el gobierno de derecha del neo electo Berlusconi.
Comisión parlamentaria de investigación
En el programa electoral del centro-izquierda, que conquistó el poder en Italia en año pasado, figuraba expresamente la institución de una comisión parlamentaria de investigación sobre lo ocurrido en Génova en 2001.
En estos momentos sólo el Partido de la Refundación Comunista se empeña en seguir pidiendo que se esclarezcan las responsabilidades políticas de los dirigentes al mando de las fuerzas del orden. Por ejemplo, el entonces vicepresidente del gobierno, Gianfranco Fini, se encontraba en la central operativa de la policía, se supone impartiendo ordenes o simplemente aprobando con su presencia los desmanes que se estaban realizando.
En la coalición de gobierno de Romano Prodi hay partidos que, alineándose con lo que pide la derecha, no están muy entusiasmados con la idea de poner en tela de juicio la actuación de la policía. Se limitan en decir que si hubo algunas “manzanas podridas” es justo que se castiguen pero que confían plenamente en los valores e ideales que inspiran las fuerzas del orden en Italia.
Prueba de esto es que el jefe de la policía, Gianni De Gennaro, sustituido recientemente por su número dos, Antonio Manganelli, no tendrá que responder de lo ocurrido en Génova ya que ha obtenido un encargo muy importante dentro del ministerio del Interior y se baraja su nombre como nuevo jefe de los servicios de inteligencia italianos.
Primera indemnización
La juez Angela Latella ha condenado al ministerio del Interior italiano a indemnizar con 24.300 euros a Rita Sieni de 44 años, miembro de un movimiento pacifista, por los golpes recibidos en las brutales e indiscriminadas cargas de la policía durante las protestas en contra del G8. A la “peligrosa” señora se le provocó la ruptura de la mandíbula, varios traumas y lesiones en todo el cuerpo.
Se espera que sean muchas las personas que presenten sus denuncias para poder obtener así una indemnización por parte de un estado que en lugar de garantizar su derecho constitucional a manifestar les golpeó sin piedad.
Hay que confiar así mismo en que los policías incriminados sean condenados a penas muy severas.
Responsabilidad política
Queda por ver si los vértices policiales y los políticos en el gobierno en aquellos años serán condenados o si por el contrario todo se limitará a castigar a algunas “manzanas podridas”.
El periódico italiano La Repubblica ha publicado las grabaciones de las conversaciones telefónicas entre los policias presentes en Génova. De ellas desprende un desprecio total y absoluto hacia los manifestantes (llegan a llamarlos “malditas garrapatas” o a alegrarse de la muerte de Giuliani) y una sensación de total impunidad que los mandos tuvieron que promover o por lo menos tolerar.
La voluntad política de aplastar las protestas en contra del G8 quedó patente en el número de efectivos desplegados en Génova: 15.000 hombres de todos los cuerpos (policía, carabineros, policía penitenciaria, policía financiaria y hasta los guardas forestales) dotados de medios económicos y materiales fuera de lo común. Y todo esto para garantizar que, en una ciudad dividida (la famosa zona roja) y ultrajada, se pudiera celebrar una reunión de jefes de estado sin ninguna trascendencia política y económica para el resto de la humanidad.